Sé que siempre hablo de música, pero hay otra cosa que también me gusta mucho y son las series, aunque puedo ser un poco friki al respecto porque no suelo seguir las habituales; es decir, no veo Juego de Tronos ni Walking Dead, Breaking Bad o Homeland. Pero sí ha aparecido una que se sale de mi rango habitual y que, después de cuatro capítulos, me gustaría comentar: The Leftovers.
The Leftlovers es una serie que actualmente emite Canal+ en versión original y está basada en la novela de Tom Perrotta Ascensión. Entre el equipo encargado de llevar la historia a la pantalla encontramos a Damon Lindelof como director, conocido por ser guionista de Perdidos. Y resalto este detalle porque cuando os hable de la premisa de la que parte The Leftlovers, los fans de Lost van a entender su participación:
Un 14 de octubre desaparece el 2% de la población mundial, así, como si se hubieran evaporado. Este porcentaje es suficiente para que algún familiar tuyo haya desaparecido o para que conozcas a alguien afectado. En este caso, The Leftovers se centra en el pueblo de Mapleton tres años después de los acontecimientos para contarnos cómo sobreviven los que se quedaron. El punto de vista es original, pero la cuestión que reconcome a todo el que ve la serie es saber que nunca descubrirá por qué desaparecieron todas esas personas. Con la mano que tiene Lindelof para los misterios, resignaos, nunca lo sabremos.
Y a partir de aquí empiezan mis reflexiones. Continúa leyendo bajo tu responsabilidad porque puede haber spoiler:
El primer capítulo me pareció inquietante y lo acabé preguntándome "¿Pero esto de qué va?" El jefe de policía va matando perros por ahí, los jóvenes del pueblo se pasan el día buscando experiencias fuertes, hay un cura desesperado por que le hagan caso y un grupo de personas vestidas de blanco que no habla pero no deja de fumar y va acechando a la gente. Como decía, una primera impresión inquietante, pero después de cuatro capítulos puedo decir que me gusta.
TODAVÍA ESTAMOS AQUÍ
A mi entender, la serie aborda diferentes formas de sobrellevar la desaparición de tus seres queridos a escala de todo un pueblo. Cuando ocurre algo tan traumático como la desaparición de alguien, pero además afecta a escala mundial, muchas son las personas que pueden perder su fe, en este caso, en la iglesia, como ocurre en Mapleton, y recurrir a otras alternativas. Así es como nos encontramos en The Leftlovers a un cura desencantado porque, tal y como él lo entiende, Dios no le ha dejado "ascender" a los cielos como los demás y, dolido como está, edita un boletín contando detalles oscuros sobre la vida de los desaparecidos para que la gente sepa que en realidad no eran tan buenas personas. Ahora tiene que enfrentarse a esta crisis de fe con una iglesia casi vacía, una esposa en coma desde el famoso 14 de octubre y una hermana a la que se le han desvanecido marido e hijos –Nora, la mayor afectada del pueblo–.
Los que ya no creen en el poder salvador de la iglesia han derivado en todo tipo de "grupos de apoyo" y sectas, siendo la más inquietante la de los Culpables Remanentes, los que van de blanco, fumando todo el rato y sin decir palabra. Eligen esta vida por propia voluntad y quieren servir de recordatorio al pueblo para que lo que pasó no se olvide. Parecen pacíficos... hasta que le quitan la iglesia al cura. Entre ellos encontramos a Liv Tyler como Meg, un personaje sobre el que se da a entender que ha pasado por mucho, pero aún no se ha convertido en una de ellos porque no va de blanco ni ha hecho voto de silencio. Se ocupa de ella Laurie, la mujer del protagonista, el jefe de policía, quien obviamente no ha asimilado muy bien el cambio de vida de su señora.
Además, su hijo mayor, Tom, –que descubrimos que no es suyo– es de los que ha acabado en la secta liderada por Wayne, un extraño personaje que capta jovencitas y tiene esa personalidad de libertador, de persona carismática capaz de ver lo que nadie ve y de convencer a los demás para que le sigan hacia la gracia. Wayne tiene especial interés en una de sus chicas, una especie de protegida, y Tom tiene la difícil tarea de encargarse de ella en ausencia del líder, oculto porque le busca la policía. Así que Tom y la protegida de Wayne huyen descalzos y con una diana pintada en la frente "porque te ayudará a ser invisible" mientras él evita las llamadas de su padre.
Otros grupos menores se mencionan a lo largo de la serie:
- Por un anuncio en la radio/tv oímos a un grupo que facilita muñecos, réplicas de sus seres queridos, a los familiares afectados con la intención de que puedan tener algo que enterrar y así superar la pérdida y poder seguir con sus vidas.
- En el cuarto capítulo vemos a un montón de personas vestidas de blanco tiradas en mitad de la calle, como si de una acción de marketing callejera se tratase, que vienen con el mensaje "Seres queridos. Manipular con cuidado" puesto en el pecho.
Los jóvenes del pueblo son otro de los puntos fuertes de la serie y a los que hay que "manipular con cuidado" como decía antes porque son como objetos inflamables después de lo ocurrido. ¿Y si vuelve a haber otro desvanecimiento? Podría ocurrir en cualquier momento, por eso ellos se dedican a vivir a tope y bien lo vemos en el primer capítulo. Entre ellos está la hija del jefe de policía, que no teniendo suficiente con la nueva opción de vida de su mujer y con su hijo evitando sus llamadas, tiene que velar por que la niña no se meta en líos.
Él es el que está en medio de todo: Kevin Garvey –Justin Theroux–, jefe de policía. Se la tiene jurada a los Culpables Remanentes por "llevarse" a su mujer y se desvive por intentar que el pueblo siga adelante, aunque no cree que esté preparado para olvidar. Suya es la frase "Todavía estamos aquí", que bastante es para él con la familia que tiene. Para rematar, su padre era el antiguo jefe de policía hasta que lo ingresaron en un psiquiátrico por oír voces. Algo interesante le tienen que contar esas voces a Garvey Senior porque algo sabe o eso se deja entrever cuando su hijo va a pedirle consejo porque empieza a tener pesadillas... En definitiva, cree estar volviéndose loco como su padre.
Y todo esto sólo en los cuatro capítulos que lleva emitidos. Una serie compleja, misteriosa y de las que hacen pensar. A mi me inquieta el tema de los perros del primer capítulo, creo que son los únicos que saben lo que pasó de verdad... Recuerdo que esto son sólo mis ideas sobre la serie, podéis aportar las vuestras.
Por cierto, como siempre hablo de música, no he podido evitar fijarme en la de The Leftovers. Es una serie muy silenciosa, pero la música que utiliza está muy bien escogida, nunca puesta al azar: Al Green, James Blake, Ty Segall, Otis Redding... El cuarto capítulo, por ejemplo, empieza con I'm not the one de The Black Keys. (Playlist en Spotify)
