Bajo del sol de Austen: Feliz bicentenario

Dentro de las celebraciones que conmemoran los 200 años de Jane Austen, el Salón de Té de Jane Austen organizó unas jornadas en torno a la autora el pasado 22 de julio. Y allí que fue una servidora y amigas a meter la nariz. Ellas están mucho más versadas en el universo de Austen que yo, que sólo he leído alguna novela y visto alguna de las adaptaciones al cine. Mi inexperiencia me hacía tener un poquito de miedo y no sabía qué esperar de un evento donde, sin duda, se darían cita grandes seguidoras de Austen, con unos conocimientos que ni puedo imaginar. Pero la verdad es que la experiencia ha sido genial, muy entretenida y con buena acogida hacia las más novatas.



El día comenzó con una interesante ponencia sobre cómo se traduce a nuestro idioma la obra de Jane Austen, cómo evoluciona su traducción con el tiempo y cómo es el trabajo del traductor. Como "quisquillosa" que soy con el lenguaje, que siempre me gusta conocer el significado y evolución de las palabras o ver más allá de ellas, la verdad es que fue una sesión curiosa. El traductor no sólo tiene que traducir un texto, sino que tiene que adaptarlo, considerar si ser fiel o no a las expresiones de la época o modernizarlas, y además tiene que conocer también la cultura y contexto del autor que traduce. Muy interesante.



Seguimos con una conferencia que nos ayudó a conocer el contexto histórico en el que vivió la autora. Aunque la parte más didáctica fue la exposición de materiales de la época: una casaca, un escritorio de campaña de 1870, un espadín de paseo... ¡Hasta aprendimos a cargar un fusil! ¿Era un fusil? No estoy muy puesta en armas, perdonadme...



La primera parte de la jornada se cerró con una amena charla sobre la influencia de Jane Austen en artistas posteriores, tanto escritores como directores de cine. ¿Hay buenas adaptaciones o buenas versiones del universo de Austen? Una discusión que da para mucho. Yo siento disentir con la mayoría reunida en la sala, pero estoy a favor del Darcy de Collin Firth ;)




¡Hora del picnic!

¿Y a la hora de comer cuál era el plan? Pues ataviarse con las mejores galas de la época y hacer un picnic en el parque. Aquí no nos daba el presupuesto para trajes de regencia, así que nos hicimos unas camisetas personalizadas (si alguien quiere una camiseta que pase por aquí). Con ellas nos sentamos entre sandwiches, bocaditos, ensaladas, patatas fritas y chuches, dispuestas a conocer un poquito al resto de asistentes. Después se hizo la foto de grupo y a seguir con la segunda parte del programa: visita guiada a la biblioteca municipal.



Vivo en la zona donde se desarrolló todo el evento, soy usuaria de la biblioteca y tengo que decir que nunca la había visto así. Nos hicieron un recorrido por las diferentes salas de la biblioteca, decorada para la ocasión con mesas temáticas, té, pastas y flores, y conocimos su forma de trabajar. Es todo un centro de ocio una biblioteca municipal. Por cierto, mi compañera documentalista se quedó con la boca abierta viendo lo bien ordenado y organizado que estaba todo.





Y aquí acabó nuestra visita. Por cuestiones de transporte no pudimos quedarnos hasta el término de la jornada, con su baile final, pero igualmente mis amigas y yo salimos encantadas. Además de lo que nos gusta que nos regalen cositas, como el pack de bienvenida lleno de marcapáginas, boli y libreta, y de los regalitos que nos tocaron en los sorteos organizados entre ponencia y ponencia.



Muchas gracias a las chicas del Salón de Té de Jane Austen por una iniciativa tan chula, por los vídeos y por la acogida. Si todavía no las conocéis, deberíais :)